Así fue en el día de ayer, donde en un fin de semana sin carreras me tomé el sabado para hacer un buen entreno con su parada para almorzar y desconectar un poco de las carreras.
Me acerqué con un compañero hasta Cocentaina con el coche y desde allí empezamos la ruta por mi zona favorita, de salida nos dirigimos hacia Lorcha pasando por Beniarrés para encarar el primero de los puertos que nos iba a llevar hasta Villalonga.
Lo subimos a buen ritmo pero disfrutando al mismo tiempo de los paisajes que se ven por esta zona, para mí este puerto es nuevo y aún lo disfruto más ya que una de las cosas que más me gusta es conocer rutas nuevas y sobre todo subir puertos. Empezamos a descender hasta que llegamos a Villalonga donde comienza el segundo puerto que vamos a subir.
Comenzamos a subir y aquí ya se nota que este puerto agarra más, ya son 10 kms al casi 6% y con el calor y el paso de los kilómetros se va notando. Aún así lo vamos subiendo a una buena marcha pero al igual que el anterior nos sobra para disfrutarlo y es que este también es un puerto de gran belleza y además otro que sumo a la lista de los que no conocía.
Coronamos y bajamos hasta salir a la Vall de la Gallinera donde cogemos dirección a Pego, ahora tenemos cerca de 20 kms de bajada pero de esas en las que hay que dar pedales. Todo esto ya es territorio conocido, ahora ya en esta zona no me queda ninguna carretera por controlar prácticamente.
Una vez llegamos a Pego nos espera el tercero de los puertos y unos de mis favoritos cuando voy por esa zona, es el puerto de la Vall de Ebo donde nos encontramos con mucho calor ya a esas horas. Este también lo subimos a un ritmo bastante alegre y pronto nos plantamos en la cima.
Tras un rápido y corto descenso llegamos a Vall de Ebo donde hacemos la parada y donde nos pegamos un merecido almuerzo.
Aunque hemos hecho más de la mitad de la ruta lo que queda es duro y más con lo que llevamos en las piernas, al salir de almorzar vamos por la Vall de Alcalá que es una zona que sin ser puerto se te puede hacer muy dura.
Tras superar la Vall de Alcalá ya solo nos queda un puerto por subir, es el puerto de Tollos que como se suele decir es pequeño pero matón. Llegamos a Beniaya que es el pueblo en donde se inicia la subida a Tollos, esta vez nos lo tomamos con más calma y subimos a un ritmo más cómodo.
Coronamos Tollos y lo más difícil ya está hecho, bajamos al pueblo que da nombre al puerto y desde allí hasta Cocentaina lo que nos queda es un terreno entre descenso y algún repecho que otro pero enseguida llegamos al coche.
Al final salió un buen entreno y es que en apenas 125 km salieron casi 2500 m de desnivel acumulado que no está nada mal.
En cuanto a las sensaciones que tuve fueron bastante buenas y aunque con algo más de peso en los puertos iba con bastante facilidad, hoy he vuelto a descansar y para mañana empiezo la semana con un entreno de unas 2h 30 con series en llano a 150-170 pm que servirán para espabilar un poco el corazón de cara a próximas carreras.
Imagen 1: Descenso del primer puerto hacia Villalonga.
Imagen 2: Ahí estoy yo subiendo desde Villalonga.
Imagen 3: Bajando por la Vall de la Gallinera hacia Pego.
Imagen 4: Mi compañero Zapa en las primeras rampas de Vall de Ebo.
Imagen 5: Zona de repechos de la Vall de Alcalá hacia Beniaya.
Imagen 6: Rampas finales del puerto de Tollos.
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Datos del entreno:
Tiempo: 4:33:10
Distancia: 124,3 km
Velocidad media: 27,3 km/h
Pulso medio: 134 pm
Pulso máximo: 173 pm
Cadencia: 77 rpm / 117 rpm
Desnivel acumulado: 2365 m
Saludosss.
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